Es probable que ahora que ya hemos dejado atrás la época estival, nuestra piel sufra las consecuencias de ella, como hemos venido comentando en los posts anteriores. No te asustes si tu piel presenta un aspecto apagado y mate. Por eso es importante exfoliar la piel después del verano, para eliminar las células muertas.
Además, la piel se vuelve áspera, acentuando el envejecimiento prematuro, debido a la falta de agua. El sol ha absorbido la mayor parte de su agua. Así, que ¿qué debemos hacer para devolverle la hidratación a nuestra piel? Básicamente, utilizar productos específicos que devuelvan y aumenten la capacidad de las células de retener su reserva natural de agua. Una piel hidratada no se descama, se arruga menos y tiene un brillo y un aspecto vital.
Eso sí, no olvides exfoliar la piel y limpiarla bien antes de aplicarte tus productos hidratantes. La piel necesita estar bien limpia para poder absorber mejor todo el agua.
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