¿Sabías que la palabra estética deriva del griego y describe todo lo relacionado con la belleza, las sensaciones y la sensibilidad? Las esteticistas o cosmetólogas son las profesionales encargadas de cuidar tu piel para que esté siempre sana.
Cuando tu piel se ve afectada o desequilibrada por cambios de temperatura extremos, cambios hormonales o alteraciones genéticas, las consejeras de belleza intentan normalizarla a través de tratamientos de belleza y curas específicas. Como si se tratara de buscar el elixir de la eterna juventud, son ellas quienes te aconsejarán para mejorar tu imagen personal, corregir imperfecciones y a sentirte mejor contigo misma.
Profesionales de la estética: ¿cómo trabajan?
En primer lugar una esteticista debe identificar cuáles son las necesidades de tu piel a través de una entrevista personal para conocer tus hábitos de cuidado. A partir de preguntas específicas podrá descubrir detalles interesantes del estado de tu piel y por qué un cosmético funciona o no.
Para saber qué le pasa a tu piel en ese momento también necesita analizarla detenidamente, valorar el grado de hidratación, volumen graso, profundidad de las arrugas, niveles de elasticidad, pigmentación, etc. Si no se conoce bien el estado de la piel, cualquier posible recomendación puede ser desacertada y el tratamiento podría no funcionar.
Con un conocimiento claro de tus necesidades, elaborará un plan de trabajo que seguido desde casa y/o que combinado con tratamiento en cabina le darán un cambio radical a la piel. Para ello es necesario tu compromiso, solo tú puedes determinar la velocidad con la que conseguirás los resultados, siempre sujetos a la frecuencia de los tratamientos, y además el rigor de utilizar la cosmética de tratamiento en casa, ¡un día olvidado es un día perdido para el tratamiento!
¿Cuál es el tratamiento para ti?
Después de que la esteticista haya analizado tu caso, determinará unas necesidades que podrán ser cubiertas con diferentes tratamientos:
- Faciales: higienes, exfoliantes, hidratantes, tratamientos antiedad, antiacné, rejuvenecimiento facial, etc.
- Corporales: exfoliantes, hidratantes, anticelulíticos, reafirmantes, relajantes, etc.
- Tratamientos del vello: fotodepilaciones, decoloraciones, etc.
- Tratamientos de manos y pies.
Además de los tratamientos puedes acudir a tu esteticista de confianza para que te ayude con programas de dietética y nutrición, maquillaje, entre otros; o para que te asesore sobre productos, servicios cosméticos y en temas de belleza e imagen integral.
Descubre tu centro de estética más cercano y acude a tu esteticista de confianza para darle a tu piel los cuidados que se merece.
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